miércoles, 26 de septiembre de 2007

MI VINO Y TU AVIÓN



Estaba allí, perfecto. Su escala, milimetradamente ajustada; sus colores sublimes; sus materiales nobles…
Horas de su vida destinada a esa, su gran obra… y el fracaso oculto quien sabe adonde.
Su avión, ese sueño gestado por años en las fantasías de sus noches… Listo para elevar sus alas y cruzar los aires, levantando su nombre en alto; pero negándose a su destino.
La gran exposición…
Todos los asistentes contemplando, asegurando que nadie le ganaría… Pero él lo sabía. Su motor fallaría.
La hora cruel llegaría. Esa hora en la cual enfrentaría la pista, encendería los motores y no arrancaría.
El codiciado no lo lograría…
El tiempo pasaba y sus supuestos lo atormentaban…
Era su última noche;…
Lo tenía decidido.
Tomaría su avión y partiría con sabor amargo

La luz se atenua y se pierde tras las cortinas. El bullicio aumenta mientras el suave sonido de las piezas guardándose en las cajas se oye…
Quea solo…
Se toma tiempo para contemplarlo… Es su último día…
Una lágrima rueda por su mejilla, siente la crueldad de la vida…y marcha con la mirada perdida…
Un pordiosero que contempla su rito, se acerca y lo mira sorprendido…
- ¿Lloras por él?- pregunta.
- Si- responde- O quizás no- agrega confundido.
El pordiosero toma su botella de vino y sonríe:
- Bebe conmigo- le dice.
- ¿Contigo?-
- Temes hacerlo, te causan repulsión mi hedor y mi aliento. ..
No te asombres entonces, de la actitud de tu avión, él es como mi vino.
- ¿Cómo tu vino?- pregunta atónito.
- Si, como mi vino…
Él llegó a esta botella como un noble… Estuvo por años cediendo su esencia, dejándose añejar por el cálido roble…
El fue uva… Tenía su cuerpo lleno de vida… Por sus células corría energía, color, luz, divinidad… Y no dudó en dejarse moler hasta perder su identidad…
No impidió que las bacterias lo deformarán y liberasen un delicado cuerpo, acunado en un fino alcohol, un elixir de cepas puras capaz de llenar de vigor hasta el alma más pura…
- ¿Y?- preguntó molesto.
- Y se encontró conmigo, un torpe hombre que huye del espejo de la vida.
- No entiendo- afirma.
- Mi vino nació para elixir y se convirtió en tormento… No por su error, sino por mi cobardía…
- No entiendo- grita.
- Tu avión es perfecto y no la sabes tú que eres su hacedor… Como mi vino lo es… Los dos son víctimas…
- ¿Víctimas? Calla, tu suciedad me asquea…-
- Como tu falsedad asquea a tu avión que sufre mirándose en tu espejo… Como mi ebriedad hace indigno a mi vino que es sumamente noble…
- No entiendo- vuelve a gritar pero ya sin violencia.-
- Tu avión es especial, una joya que todos admiran menos tú que sólo lo evalúas por su vuelo… Otros vinos como el mío ocupan lugar en los grandes salones, entre señores distinguidos…-
Callándose se arrastra hasta el avión y lo toma entre sus manos…
Acerca su oído a él y luego lo acuna como a un niño…
- No temas pequeño- le dice
.- Te equivocaste amigo, ya no sufras… Mírate en el espejo de los nobles y estarás en la mesa real como le sucede a los hermanos de mi vino.

domingo, 23 de septiembre de 2007

EL PATITO FEO

Recuerdo mi infancia rodeada de cuentos…, mis libros, mis sueños. Mi refugio de niña que busca y no encuentra, que clama y no halla, que implora y llora…
Mis sueños… amigos entrañables que favorecían mis huidas, que me conducían hacia ese callejón tan mío…
Mi mundo… ese que solo yo recuerdo…
Mis cuentos… Cenicienta, Blanca Nieves, Aldino y el Patito Feo; personajes sinceros que cumplían mis anhelos…
Ellos sí que eran…Sus mundos tan perfectos, rodeados de escondrijos, dolores, llantos pero… al final el gozo, las sorpresas y las recompensas a tanto lamento…
Hoy los recuerdos y entiendo… Ahora que la metamorfosis me alcanza y me descubro, ahora que permito que el final se acerque y me atrevo a creer que puedo… Que quizás antes de la muerte, seré feliz y comeré perdiz…
¿Será esto la madurez o será sólo un vestigio de sabiduría obtenido como simple recompensa a una lucha siempre mantenida?
Esa lucha que me fue llevando poco a poco por caminos sinuosos, en los cuales sentí la crueldad, la soledad, encontré los cazadores que me hicieron percibir el hedor de la muerte… y hasta llegué al frío río donde se me congelaron los huesos y sentí el profundo deseo de permanecer así… detenida en el tiempo…
Encontré además esos brazos cálidos que supieron cobijarme… pero no eran mi espacio… Eran sólo personas a los que les inspiré ¿lástima? ¿compasión? ¿asombro? 0 ¿deseos de conservarme como mascota?
¡Cuanto sufrí cuando me abandonaron!… pues era tal mi soledad que me contenté con sus migajas y hasta se me tornaron imprescindibles…
Pero fue así la vida… No me dio tregua… No se si fue una decisión permanecer en la lucha o sólo la consecuencia lógica…
Seguí… Y hoy me miro en el nuevo espejo… ¡cuánto me costó hacerlo!...
Sentí que algo era diferente… Mi esencia me golpeaba desde muy adentro… pero temía… ¿y si otra vez no era cierto?.
Hoy siento que nado en el amplio estanque pero… aún temo… De repente algo brota desde muy adentro… me punza y vuelvo a buscarme en la imagen del bello espejo que el agua me ofrece…
Me miro, los miro y sé que nado entre ellos…